Le voy a hacer bailar, toda la noche... Lo prometió I Hate Models en ediciones anteriores del Monegros Desert Festival, y no se equivocó en absoluto. En este icónico festival, donde la música suena durante más de 22 horas ininterrumpidas, la promesa del baile se convierte en una regla. Por la tarde, por la noche y hasta la mañana del día siguiente.
El Desierto de los Monegros, en la localidad de Fraga, se convierte cada año en el epicentro de la música electrónica en Europa con el festival Monegros Desert Festival. El evento atrae a miles de amantes de la música electrónica a un escenario único y árido desde su primera edición.
El origen está en 1994, cuando el Festival nació como un pequeño encuentro de música electrónica. Sus promotores, Juan y Cruz Arnau, no se esperaban que las cosas fueran a llegar tan lejos: "Estamos muy agradecidos a todo el público que nos apoya cada año y que se desplaza desde todos los rincones del mundo para unirse a este gran evento que organizamos desde hace 31 años con tanto cariño. Nuestro objetivo era posicionar Aragón y el Monegros Desert Festival en el circuito de festivales internacionales de la escena electrónica y más actual, y parece que lo hemos logrado".
A lo largo de los años, el Monegros ha crecido significativamente, ha pasado de ser una fiesta local a uno de los festivales de música electrónica más grandes de Europa. Lo que comenzó como una pequeña reunión ha crecido hasta convertirse en un evento de renombre mundial, sin perder nunca su esencia y su conexión con el entorno natural que lo acoge.
"Soy el técnico de PA pero de los grupos, soy el que viene a mezclar con las bandas, trabajo en el control de sonido y puedo asegurar que esto es una locura, todos los escenarios suenan increíble, todo el curro de sonido en los escenarios está mega trabajado", explica Juan Prádenas, que ha llegado desde Madrid para trabajar con el equipo del festival.
El desierto fragatino ofrece el escenario perfecto: semiárido, con un entorno espectacular y diferente a cualquier otro festival. La ubicación en pleno desierto proporciona una experiencia única. La mezcla de la música pulsante, la arena y el cielo estrellado crea un ambiente mágico que atrae a miles de amantes de la música electrónica cada año.
El ambiente del Monegros Desert Festival es electrizante y único, con múltiples escenarios temáticos que ofrecen una experiencia visual y auditiva inmersiva. Las vibraciones positivas son palpables en cada rincón del festival, desde las pistas de baile hasta zonas de descanso y espacios gastronómicos. Uno de los principios más destacados de este festival es su capacidad para reunir personas en un ambiente de celebración y respeto mutuo.
La diversidad de los asistentes crea una comunidad global que comparte una pasión por la música y cultura electrónica. "Al ser un festival que dura solo un día notas la motivación en todo el mundo y las ganas de pasarlo bien, todo el mundo baila sin descanso. Se crea una vibra muy especial", explica Sergio González, que asiste por quinta vez al festival desde Tarragona..
Para muchos, regresar al festival es un ritual fijo. Es el caso de Daniel Lorente, que, desde Valencia, repite por tercera vez su experiencia en Monegros: "Me llama mucho la atención que el festival sea todo seguido, poder bailar durante más de 22 horas sin parar. Por otro lado también me encanta que pueda escuchar los sets de mis djs favoritos en un solo lugar".
Alba García, una visitante aragonesa, comparte sus razones para volver este año. "Me gusta que sean más de 20 horas seguidas de festival, porque lo hace más accesible para quienes trabajamos, ya que no hace falta pedir vacaciones. Al ser de la zona, acaba siendo un festival en el que nos juntamos con mucha gente del pueblo a que nos conocemos".
Monegros Desert Festival destaca por su cartel impresionante, que reúne a algunos de los DJ y productores más renombrados del panorama internacional: Charlotte de Witte, Andrés Campo, Patrick Mason y Josep Capriati entre otros. En esta edición, el desierto ha reunido a más de 150 artistas legendarios y emergentes en 12 escenarios diferentes."Recomiendo elegir entre tres o cuatro djs que quieras ver sin duda y, el resto del tiempo, estar abierto a lo que vaya surgiendo. También hay que dosificar un poco el ritmo, porque son muchas horas y hay que aguantar hasta el final. El cierre merece mucho la pena", explica Alba. Con un enfoque en la adversidad y la calidad, el festival ofrece una amplia gama de estilos dentro de la música electrónica.
Los Monegros, 2024.SERGI ALCÁZAR
Monegros no es solamente un punto de encuentro para los aficionados a la música electrónica, sino que también tiene un impacto significativo en la economía local. Cada año, miles de personas de diferentes partes del mundo y de España viajan a la comarca, generando ingresos a través del turismo y la hostelería.
Como cualquier evento de gran magnitud, el Monegros Desert Festival ha enfrentado varios desafíos, incluyendo problemas logísticos, ambientales y de seguridad. Sin embargo, la organización ha demostrado una capacidad notable para adaptarse y superar estos obstáculos, implementando medidas para minimizar el impacto ambiental y garantizar la seguridad de los asistentes.
Mientras el sol se pone sobre el vasto paisaje del desierto, el festival continúa resonando en los corazones de quienes lo han vivido Cada año, el festival atrae a miles de personas, creando recuerdos inolvidables y tejiendo historias compartidas bajo el cielo estrellado de Aragón. Mientras el eco de la música se desvanece en el aire cálido del desierto, queda la certeza de que el espíritu del festival perdurará.