Balance del Monegros Desert Festival: "No podemos estar más satisfechos de esta edición"

Elperiódico

«No podemos estar más satisfechos con el resultado de la celebración de este 30 aniversario. Un año más, el Monegros Desert Festival ha conseguido reunir a un sinfín de amantes de la música y reflejar el verdadero espíritu del concepto rave; toda una experiencia radical audiovisual y extrema capaz de convocar a 50.000 personas en una sola noche. Desde la familia Arnau, queremos agradecer a todos los asistentes, trabajadores y amigos que han hecho posible que el sueño de nuestra familia se haga realidad una año más. Este 30 aniversario quedará marcado para el recuerdo de todos nosotros». Con estas declaraciones, los hermanos Arnau hacían un balance muy positivo de la trigésima edición del Monegros Desert Festival que concluyó ayer al mediodía con una sorpresa. 

Esta fue la aparición de Kase.O, figura clave del hip hop patrio, con una performance a dúo durante el set de closing de Andrés Campo. Los coros de 'Ringui Dingui' y 'Mitad y mitad' serán recordados por aquellos que acompañaron al del barrio zaragozano de La Jota en este apoteósico cierre.

Esta edición, que congregó a asistentes de 87 países, fue más calurosa y mejorada con respecto al año pasado en cuanto a sostenibilidad, puntos de agua, sombras, limpieza, accesos y seguridad.

Más de 20 horas de música

La música resonó durante más de 20 horas en un entorno «invadido por el amor, el respeto y el baile», según la organización, que contó con once escenarios de diferentes temáticas. Algunos ejemplos son el Sound System Temple , diseñado con materiales reutilizados, o la alegre y festiva psicodelia ofrecida en Elrow Stage. A los que se sumaron la Techno Cathedral, una distopía industrial para los amantes de la música electrónica; o Jet, un auténtico Airbus A330 de 60 metros. Tampoco se puede olvidar a la nueva entrega de esta edición, el Open Air, hecho a base de 10.000 piezas de manera kinética; al Pajar o al Corral; que honraron las raíces hogareñas de este encuentro.

Entre las actuaciones más destacadas de esta edición figuró el show de las leyendas del rap Wu-Tang Clan, con una actuación de su banda al completo y en directo. Su concierto concluyó con una versión del mítico tema 'The Champ', de The Kid Daytona.

También la unión de Trym con Shlomo y los cierres, ya por la mañana, de Ilario Alicante, Héctor Oaks y Nico Moreno. Mención especial merecen dos de los djs más internacionales, Óscar Mulero y Paco Osuna, con doble sesión en momentos muy diferentes de la jornada: el opening y el atardecer.

Además, la presencia de figuras clave de la escena electrónica como Richie Hawtin, Seth Troxler o Amelie Lens, consolidaron la consistencia de un festival que es capaz de innovar y superarse sin perder su esencia a lo largo de tres décadas.

Una evolución constante

Un evento que ha evolucionado cautivando a nuevas generaciones, y que lo continúa haciendo con su público más veterano. Al final, con este espectáculo que combina la experiencia visual y auditiva, una apuesta que llevan siguiendo la mayoría de festivales de primera división como Tomorrowland o Sziget, Juan Arnau quiso dejar claro que «el festival está yendo por buen camino, y más con resultados como estos. Queremos expandirnos hacia un marco referente internacional y, por supuesto, que la gente se lleve recuerdos para la posteridad».

Para el promotor, «esta es una experiencia que hay que vivir al menos una vez en la vida. Todo el mundo puede encontrar un escenario o artista con el que pueda llegarse a identificar». Y es que no es de extrañar, puesto que entre los 90 países provenientes, destacaban territorios como Italia, Alemania, Estados Unidos, México o Japón; lo cual deja ya claro la influencia global que la velada está consiguiendo.


Ver galería de fotos de Jaime Galindo